PASCUA

La conocida como Semana de Pascua me ha venido perfecta para desconectar un poco de la intensa rutina laboral , airearme, renovar fuerzas para la vuelta. En mi refugio de Navaluenga (Avila) he podido disfrutar de la familia y los amigos, del placer de rodar por sus carreteras y puertos, del buen tiempo y la buena comida. 

 

Lo que viene a ser, en resumen, unos días de vacaciones. Las fotos hablan por sí solas...

 

#nadieentrena
#navaluenga

SEVEN DAYS

Puntual a la cita, como últimamente viene siendo habitual, cada siete días, los días laborables para eso, para laborar y el fin de semana, por lo menos el sábado, a disfrutar de la bicicleta. Esta vez con buen tiempo y con madrugón incluido, me pilla fuera de la ciudad.

Salida complicada, a la altura de Villodas pinchazo de un compañero, parece ser que estamos en modo carrera y paramos cuatro, el resto para adelante así que, después de subsanar el percance mecánico, toca remar, a relevos, subida de Montevite y Guinea incluidos, en el ascenso a La Lastra hago el primer relevo a tope y el corte, aguanto el tipo después de ceder el puesto y acabo lo más dignamente posible. La vuelta más tranquila, las piernas no dan para más, lo poco que tenía lo dí en la primera parte de la jornada así que dentro del grupo a esperar mejores tiempos.

Un día esta semana, por lo menos el sol está presente, que aguante un poco que ya teníamos ganas... Cumplo con 122 km., 1,456 mts. de desnivel acumulado y treinta de media.

#nadieentrena

#apretandoloquesepuede

#strava

ESPERANDO AL FINDE

Esperando al fin de semana los días de labor se alargan sin remedio, el sábado nos recibe con previsión lluviosa, nos vamos a mojar pero hay que intentarlo, salida con la grupetta con el único objetivo de esquivar la lluvia. Abrochar la Fiandre y a rodar, el primer embite de lluvia en Aberásturi, ahí el grupo ya se ha partido y algunos enfilan de nuevo dirección a casa, un pequeño pelotón nos arriesgamos y, después del calentón de los relevos de un par de compañeros y un servidor, enfilamos por los repechos de Mendiola al Puerto de Vitoria, lo subimos bajo algunas gotas a ritmo tranquilo, en la zona de Treviño suelo seco así que aprovechamos la ventana de tiempo y sumamos kilómetros por la zona de San Martín de Zar. Vuelta a casa esta vez por Zaldiaran y al otro lado la lluvia nos vuelve a recibir, suelo húmedo hasta llegar a casa tras una subida al puerto que se me hace larga, el parón se nota. Cumplimos con 100 km. pasados, quién lo hubiera imaginado a primera hora, nadie apostaba por eso, ni el más optimista, brindamos por ello y por la victoria de Egoi en nuestro particular "Gran Premio de la Subida al Santo".

Domingo triste encapotado y lluvioso típico del Norte, aunque las sábanas intentan atraparme consigo zafarme y calzarme las zapatillas de correr para rodar un rato en ayunas. Salgo calle abajo sin destino concreto, bajo un incesante txirimiri a medida que pasan los kilómetros me voy animando y al final cumplo entre carreteras comarcales y callejeo con 12 km. a 4,30. Ducha reconfortante y a esperar de nuevo 5 días hasta la siguiente oportunidad, ya queda menos.

#nadieentrena
#fiandre
#maltiempo